Los Miami Heat se impusieron este lunes a Los Ángeles Lakers (108-107) en un partido muy igualado en el que se dejaron remontar hasta 11 puntos en el último cuarto y en el que los angelinos tuvieron el último tiro para ganar, pero lo fallaron con Cam Reddish.
Por parte de Miami brilló Jimmy Butler con 28 puntos, pero estuvo muy bien acompañado por un Tyler Herro que firmó 22, y un Adebayo con triple-doble firmando 22 tantos, 20 rebotes y 10 asistencias.
Los 30 puntos del ‘ex’ LeBron James y los 23 de Austin Reaves fueron insuficientes, pese a que mantuvieron las opciones de los suyos hasta el último suspiro. La mala noticia para los Lakers es la lesión de Anthony Davis, que no disputó ningún minuto en el último cuarto.
Los Lakers cierran una gira muy negativa por Florida con dos derrotas en Orlando y Miami.
El primer cuarto tuvo un nombre propio sobre todos los demás, Bam Adebayo, que supo ser efectivo en defensa fuera quien fuera su par, incluso taponando. Pero además en ataque fue muy completo, anotando nueve puntos, repartiendo cinco asistencias y capturando cuatro rebotes.
El pívot de los Heat incluso anotó un triple, libre de marca no lo dudó a la hora de lanzar y convirtió el noveno de toda su carrera, el último había llegado hace casi un año, el 30 de noviembre de 2022.
Pese a este dominio de Adebayo, no se reflejó en un control del partido de los locales, más bien en un marcador muy cambiante y con alternancias para ambos equipos. Los Lakers fabricaron un buen parcial de 2-11, mejorando en defensa y siendo por momentos más efectivos en ataque.
Un triple de Jaime Jáquez nada más salir a pista a menos de tres minutos para finalizar el cuarto, devolvió la iniciativa a Miami en el marcador con el 26-25. Posteriormente se cerró en tablas: 33-33.
Miami salió en tromba en el segundo cuarto, logrando un parcial favorable de 7-2 con los hombres de la segunda unidad como protagonistas. Un triple de Josh Richardson, una bandeja de Duncan Robinson y un mate de Thomas Bryant sorprendieron a los Lakers.
Siempre controló el marcador Miami, pero sin llegar a despegar. Los Lakers se sintieron cómodos a esa distancia de cuatro o cinco puntos, hasta que volvieron a ponerse por encima (51-52) con una canasta de Taurean Prince a poco más de tres minutos para el descanso.
Todos los jugadores que entraron en pista por ambos conjuntos anotaron, pero brilló con luz propia un Reaves que mostró unas condiciones atléticas espléndidas. Suya fue la última canasta antes del descanso.
Con cinco de ventaja para Miami, se la jugó de tres LeBron y no entró, pero Reaves entró desde fuera para capturarla en el aire y hundirla, dejando así el 62-59 antes de ir a vestuarios.
Pese al buen trabajo de Adebayo en defensa, los Lakers abusaron de las opciones desde cerca del aro, llegando a sumar en estos primeros 36 minutos hasta 50 puntos en la pintura, 15 de ellos en transiciones rápidas ante las que el balance defensivo local no pudo responder.
Dos de ellas vinieron tras dos pérdidas de balón consecutivas de Miami que generaron sendos contraataques de los Lakers culminados por LeBron James colgándose del aro y adornándose. El Kaseya Center le ovacionó, parte por aficionados de los angelinos pero también por aficionados locales.
Fue el momento en el que apareció Butler, que cerró este penúltimo periodo con 11 puntos, y Miami se fue hasta 12 arriba (87-75) a tres minutos para la conclusión del tercer cuarto.
Este parcial, demoledor, coincidió también con la ausencia de LeBron James. Y se redujo después mínimamente a falta del último cuarto con el 90-79.
Tras una buena salida a pista en el último periodo, los Lakers volvieron a cometer errores graves en ataque, perdiendo balones que pudo aprovechar Miami, concretamente un Jaime Jáquez muy fiable que anotó dos bandejas seguidas tras correr la pista. El mexicano terminó firmando otra vez nueve puntos, como ante Washington, en su mejor actuación anotadora hasta el momento en su corta trayectoria en la NBA.
Los últimos minutos fueron una batalla por sentenciar por parte de los locales y de reengancharse por los visitantes, pero sin éxito. Por parte de los Heat, tanto Butler como Herro mostraron su mejor versión, fueron letales, entre los dos sumaron 12 puntos en el último periodo.
En los Lakers LeBron asumió la mayor responsabilidad una vez que Anthony Davis se quedó lesionado en el banquillo. Los californianos llegaron a ponerse a un punto (108-107) con un dos más uno de James.
Con un minuto por jugarse, tan solo había un punto de diferencia entre ambos. Nadie anotó, y se llegó a 8.9 segundos del final con LeBron cediendo el último tiro a Cam Reddish, abierto en la esquina, pero la falló y ese 108-107 quedó como definitivo.