Racing de Argentina se proclamó campeón de la Copa Sudamericana 2024 al vencer 3-1 al Cruzeiro de Brasil este sábado en Asunción, en la final disputada en el estadio La Nueva Olla ante unos 45.000 espectadores en su mayoría hinchas de la Academia.
Los goles del equipo dirigido por el técnico argentino Gustavo Costas fueron obra de Gastón Martirena, Adrián Martínez y Roger Martínez, a los 15, 20 y 90+5 minutos.
El descuento de Cruzeiro fue una conquista de su delantero Kaio Jorge, a los 52 minutos.
La Academia se llevó el trofeo del segundo torneo de clubes en importancia de la Conmebol y un premio de 6 millones de dólares, una consagración que consigue después de una sequía de 36 años sin lauros internacionales.
Frente a 45.000 espectadores, en su mayoría fanáticos de la Academia que se trasladaron hasta la capital paraguaya desde distintos puntos de la Argentina, el conjunto de Costas sufrió hasta el final del partido.
El delantero colombiano Roger Martínez se encargó de sellar la victoria a través de una rauda incursión por derecha, que terminó en un remate potente que se incrustó dentro del arco defendido por el habitualmente solvente portero Cassio, a los 90+5 de juego.
- Se suelta la Academia –
En esta ocasión, el guardameta no estuvo con todas las luces prendidas.
El primer tanto se atribuye a una desinteligencia suya, a los 15 minutos.
El defensa Gastón Martirena lanzó una pelota larga desde la derecha que parecía destinada a buscar la cabeza de sus delanteros Adrián Martínez y Maximiliano Salas.
La pelota llegó con rosca a su arco y se introdujo suavemente hacia el segundo palo. A Cassio posiblemente le encandiló el sol, en una tarde calcinante para un partido que se jugó bajo 37 grados centígrados.
Racing había apretado de entrada y puso al Cruzeiro contra las cuerdas.
A los 3, el mismo Martirena hizo explotar las gradas al anotar tras un pase de Salas desde la izquierda. Sin embargo, el VAR determinó que hubo posición adelantada.
Un pelotazo largo de Salas encontró mal parada a la defensa brasileña. La pelota fue controlada por Adrián “Maravilla” Martínez y el 9 asistió al uruguayo Martirena quien definió de derecha al primer palo de Cassio.
Los jugadores de Cruzeiro no reaccionaron. Les pesó el tanto en contra y el equipo de Gustavo Costas se dio cuenta.
No cejó en sus ataques por el lado de Salas por izquierda. Este volvíó a realizar uno de sus centros rasantes que controló “Maravilla” para someter a Cassio y decretar la segunda conquista, a los 20 minutos.
La Raposa trató de entrar en el partido y sus delanteros intentaron llegar a través de Matheus Henrique y Caio Jorge pero los goles refrescaron a los pupilos de Costas hasta el final del primer tiempo.
- Cruzeiro se envalentona –
Los dirigidos por Fernando Diniz volvieron con más determinación en el segundo tiempo y emparejaron las acciones.
El descuento se produjo por intermedio de su goleador Kaio Jorge producto de una gran jugada de Matheus Henrique. El portero Arias alcanzó a taparle un peligroso remate de cabeza pero el delantero lo superó en el rebote.
Fue la mejor jugada colectiva de Cruzeiro que dejó impotente a la defensa de la Academia.
A partir de entonces, el juego se desarrolló en el medio, con algunos chispazos en cada una de las áreas, con un Racing más conservador y con una superioridad manifiesta del cuadro brasileño.
La sensación del empate revoloteaba en el ambiente con un dominio evidente del conjunto de Belo Horizonte.
Pero el once de Diniz no pudo llegar o Arias lo impidió y entonces se produjo la última jugada mortal que capitaneó el colombiano Roger Martínez, sustituto de “Maravilla”. En el último minuto marcó el 3-1, a los 90+5, con un remate franco, de frente que se coló en la valla de Cassio.
Desde ese instante, Costas y sus muchachos saltaron a los gritos de “campeón”, “campeón” hasta el pitazo final del árbitro uruguayo Esteba Ostojich.
