Por haber comprobado que están afiliados a algún partido político, el Instituto Nacional Electoral (INE) sacó de sus instancias de capacitación y supervisión hacia el 2 de junio a 921 militantes de las siete formaciones que competirán a nivel nacional.

Los cachirules electorales que buscaban trampear la ley se habían inscrito como capacitadores asistentes electorales (CAE) y supervisores electorales (SE).

En sesión extraordinaria realizada la tarde de ayer entre los tres consejeros que integran la Comisión de Quejas y Denuncias se aprobó por unanimidad dar de baja a 921 personas que ya eran parte del proceso de los CAE y SE.

Los CAE se encargan de motivar y capacitar a quienes resultan sorteados para participar como funcionarios de casilla. Los SE son los responsables de reunir y verificar la información que se va generando para registrar el avance de las actividades de la capacitación electoral e integración de las mesas directivas de casilla. Sus funciones son determinantes para lograr una exitosa jornada electoral.

La ley electoral vigente establece que el INE debe contratarlos mediante una convocatoria para capacitar y supervisar a quienes instalarán las mesas directivas de las casillas el día de la votación, el próximo 2 de junio.

La presidenta de la Comisión de Quejas y Denuncias del INE, Claudia Zavala, se congratuló del trabajo acucioso que se realizó en el instituto para verificar con documentos oficiales el hecho de que los 921 militantes dados de baja están registrados en los padrones de sus respectivos partidos.

Los casos fueron ordenados en 89 expedientes: 37 corresponden a militantes de Morena, 15 a gente afiliada al PRI, 12 son por casos vinculados al PVEM, 10 a los relacionados con PRD, 7 expedientes son de registrados ligados a MC, 5 del PT y 2 del PAN.

El acuerdo avalado ayer indica que es procedente la adopción de medidas cautelares en contra de las 921 señalados. Sin embargo, la consejera Zavala recordó en la sesión que, como lo indica el documento, esta resolución es impugnable si los involucrados llegasen a presentar una queja ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que tendría la última palabra.

Anteriormente, Morena presentó una queja ante el TEPJF argumentando la Unidad Técnica de lo Contencioso Electoral de la Secretaría Ejecutiva del INE no estaba facultada para dar de baja a las personas con militancia. En la Sala Superior se determinó que esa tarea le correspondía a la Comisión de Quejas.

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