Con la presencia desde este martes en Acapulco del chef de origen español, nacionalizado estadounidense, José Ramón Andrés Puerta, su organización World Central Kitchen (WCK) continúa ofreciendo desde hace una semana alimentos y agua potable a la población damnificada de Acapulco, tras el paso del huracán “Otis”.

El reto es lograr la elaboración de 100 mil raciones de comida, explicó.

Sin embargo, destacó que con el apoyo de restauranteros de Acapulco y distintas compañías de la industria han podido elaborar tortillas y pan para los alimentos que distribuyen en las comunidades.

El programa de WCK tiene como base Chilpancingo donde el equipo conformado por distinto personal de cocina y apoyo, preparan comida caliente y sándwiches, además de bebidas hidratantes para transportarla vía aérea en helicópteros hasta las zonas alejadas del puerto, donde aún no ha sido posible que llegue la ayuda gubernamental, como es el caso del Espinalillo en Coyuca de Benítez.

También elaboran directamente en una cocina instalada en Acapulco donde atienden a personas que aún no tienen electricidad ni servicios básicos.

El menú de esta semana incluyó pechuga de pollo encebollada, tinga, pollo a la mexicana, pollo horneado, frijoles y arroz.

Juan Camilo, parte del equipo de esta organización, que lo mismo ha brindado alimentación a migrantes en Europa que a desplazados en Afganistán, Armenia, Ucrania y recientemente de Israel, destacó el uso de las dos aeronaves con que cuentan para llegar a las zonas donde aún los caminos no han sido despejados para arribar por tierra.

Recién se confirmó la devastación del puerto turístico y sus comunidades tras el paso del fenómeno meteorológico, el chef José Andrés envió un mensaje al presidente López Obrador pidiendo su respaldo para que a la sociedad civil, nacional e internacional, se le permitiera sumarse al apoyo para la población afectada por “Otis”.

La organización sin fines de lucro World Central Kitchen surgió en 2010 luego del terremoto que azotó a Haití. Su fundador José Andrés, junto a su esposa, Patricia, decidió apoyar con un equipo de cocineros para atender las necesidades de alimentación urgente.

Shares: