EFE / Al menos una persona muerta, más de 40.000 afectadas y 143 comunidades incomunicadas ha dejado la tormenta tropical Sara, que desde el jueves azota con mayor incidencia toda la región caribeña de Honduras, informaron este sábado las autoridades de protección.
En su primer informe de la jornada, la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco) indicó que a nivel nacional se ha registrado una persona ahogada por sumersión en el departamento de Yoro (norte); 47.421 afectadas y 778 familias damnificadas.
Otras 107 personas han sido evacuadas y 507 albergadas.
El titular de la Copeco, José Jorge Fortín, dijo a los periodistas que “el sistema mantendrá las lluvias, el oleaje alterado y vientos racheados durante las próximas 36 horas”.
Según la Copeco, los mayores daños se registran en los departamentos de Gracias a Dios, Colón y Atlántida, todos costeros, y Yoro.
La tormenta tropical ha permanecido estacionaria durante las últimas nueve horas y se espera que en el transcurso del día comience a avanzar hacia el noroeste, acercándose a Belice, indicó el meteorólogo Víctor Ortega.
Se espera además que en el transcurso del día el fenómeno comience a avanzar hacia el noroeste, acercándose a Belice, agregó.
Según los pronósticos oficiales, las precipitaciones continuarán en casi todo el país, pero la mayoría se concentrarán en los departamentos de Atlántida, Islas de la Bahía, Cortés, en el Caribe, y Santa Bárbara, oeste.
El informe añade que está aumentando el nivel de los caudalosos ríos Ulúa y Chamelecón, que nacen en el oeste y desembocan en el Caribe, lo que podría provocar el desbordamiento y la afectación de zonas bajas urbanas y rurales.
La Copeco mantiene en alerta roja (evacuación inmediata) cinco departamentos y tres en alerta amarilla (vigilancia), en el Caribe, norte y este, mientras que los diez restantes del territorio hondureño permanecen en alerta verde (preventiva).
Hace cuatro años, en la primera quincena de noviembre de 2020, las tormentas tropicales Eta e Iota dejaron alrededor de un centenar de muertos, millonarias pérdidas materiales y 3,4 millones de personas afectadas, de los casi diez millones de habitantes que tiene el país, según fuentes oficiales.