El expresidente Jimmy Carter trajo un breve momento de unidad nacional a un Estados Unidos dividido durante su funeral de Estado celebrado este jueves en la catedral de Washington, cuando faltan 11 días para la investidura de Donald Trump.
El presidente saliente, el demócrata Joe Biden, pronunció la elegía fúnebre por su amigo, como se lo pidió el propio Carter cuando se vieron por última vez hace cuatro años.
“Tenemos la obligación de no dejar espacio para el odio y de plantar cara a lo que mi padre consideraba el mayor de los pecados, el abuso de poder”, dijo el octogenario a pocos días de que su rival republicano regrese a la Casa Blanca para un segundo mandato que se anuncia turbulento.
Los presidentes entrante y saliente aparcaron su rivalidad para despedir juntos a Carter, fallecido el 29 de diciembre a los 100 años en su Georgia natal.
Carter fue un cristiano “bautista blanco del sur que lideró los derechos civiles, un veterano condecorado de la Marina que negoció la paz, un brillante ingeniero nuclear que lideró la no proliferación nuclear, un granjero trabajador que defendió la conservación y la energía limpia, el presidente que redefinió la relación con el vicepresidente”, afirmó Biden.
Fuerza de carácter
Alabó su “fuerza de carácter”. “Hizo justicia, amó la misericordia y caminó humildemente”, comentó ante unas 3,000 personas, entre las que se encontraban los expresidentes Barack Obama, George W. Bush y Bill Clinton.
En la misma catedral neogótica ya se despidió a otros exmandatarios estadounidenses: Dwight Eisenhower, Ronald Reagan y George H.W. Bush.
El funeral se celebra días antes de otro momento de profundo cambio para Estados Unidos, con el regreso de Trump al Despacho Oval.
Obama estrechó la mano y charló con el millonario republicano en este día de luto nacional.
También hubo un breve momento de distensión entre Trump y su exvicepresidente Mike Pence, quienes se dieron un apretón de manos. Es la primera vez que se los ve saludarse así públicamente desde los disturbios en el Capitolio de 2021, cuando Pence se negó a respaldar las falsas afirmaciones de Trump de que había ganado las elecciones de 2020.
Desde el sábado las banderas ondean a media asta en todo el país y se suceden los homenajes al demócrata.
Varios nietos del difunto le rindieron tributo en el púlpito, cerca del ataúd, cubierto con una bandera estadounidense.