Es uno de los encuentros más exclusivos del mundo. En el “campamento de verano de los multimillonarios”, como lo bautizó la prensa, están reunidos esta semana algunos de los más influyentes líderes empresariales y magnates estadounidenses, para discutir -a puerta cerrada- sobre asuntos de negocios, pero también sobre el destino político y económico del país.
Cuando solo faltan cuatro meses para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, se cree que el intenso debate sobre la candidatura del presidente Joe Biden -después de su cuestionado desempeño con el último debate con Donald Trump- es uno de los temas que aparecerá en gran parte de las conversaciones entre los asistentes al evento que se extenderá hasta el sábado.
La conferencia, organizada por el banco de inversión Allen & Company en Sun Valley, una ciudad turística en Idaho, se ha convertido en una reunión privada a la que solo asiste la élite de la élite desde su creación hace cuatro décadas.
Este año llegaron en sus jets privados figuras como el fundador de Amazon, Jeff Bezos; el director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman; el director ejecutivo de Apple, Tim Cook; el director ejecutivo de Disney, Bob Iger; el director ejecutivo de Warner Bros, David Zaslav, el cofundador de Microsoft, Bill Gates; la empresaria de medios de comunicación, Shari Redstone; además de algunas celebridades como Oprah Winfrey.
A pocos meses de la elección presidencial
La conferencia anual, cuya primera edición se llevó a cabo en 1983, ha sido el lugar de nacimiento de grandes acuerdos comerciales y el lugar en el que los líderes de grandes conglomerados discuten el futuro de sus negocios, así como el rumbo de Estados Unidos.
Dominada por la presencia de titanes de los medios de comunicación y el entretenimiento, junto a los magnates tecnológicos, es probable que formen parte de la agenda temas como el impacto de la inteligencia artificial en la industria y el futuro del streaming, así como el millonario negocio de las transmisiones deportivas.
En paralelo, las elecciones presidenciales estadounidenses -y sus efectos en la economía y los negocios- estarán en el centro de las conversaciones.
Este año, la conferencia llega idías después después del debate presidencial del 27 de junio en el que el desempeño del presidente Joe Biden fue duramente cuestionado, provocando llamados de algunos legisladores demócratas, donantes y miembros del partido, para que dé un paso al costado en favor de un candidato más joven.
Las dudas sobre la capacidad del presidente Biden para gobernar el país durante los próximos cuatro años han hecho que el tema domine la agenda política estadounidense.
En medio de ese debate, es poco probable, dice la prensa nacional, que los magnates del sector tecnológico y de los medios de comunicación y el entretenimiento, no conversen sobre los posibles reemplazos de Biden en la carrera a la Casa Blanca y cómo esto puede afectar el resultado de las elecciones.
El presidente, sin embargo, ha dicho en reiteradas ocasiones que no tiene planes de abandonar su candidatura a la reelección.
Uno de los puntos clave que podría influir en un giro en la campaña demócrata es el peso de la opinión de los donantes, algunos de los cuales forman parte -directa o indirectamente- del exclusivo círculo reunido en Sun Valley.
Hablemos de negocios
La prensa estadounidense especula que las conversaciones de este año incluirán temas como el plan de sucesión de Bob Iger en Disney y las vertiginosas negociaciones que llevaron a la fusión de Paramount Global y Skydance Media.
El futuro de Warner Bros. y Comcast también sería otro asunto relevante, mientras Disney analiza planes para comprar una parte de Comcast.
En los últimos tiempos, las empresas de medios están apostando por asociar sus operaciones de streaming con las de sus competidores, para reducir costos y mejorar la rentabilidad del negocio, señalan expertos del sector.
Disney y Warner Bros., por ejemplo, están agrupando Disney+, Hulu y Max, mientras que Comcast tiene un paquete que agrupa a Netflix, Apple TV+ y su propio servicio Peacock, según informó Bloomberg.
Los derechos de transmisión son otro de los grandes negocios que suelen estar presentes en Sun Valley.
Por ejemplo, la Asociación Nacional de Baloncesto, está negociando un posible acuerdo de US$76.000 millones por 11 años con Disney, Comcast y Amazon.
Con esos y otros temas sobre la mesa, lo que se discuta en Sun Valley tendrá un gran impacto comercial.
Y las conversaciones tras las bambalinas sobre el futuro político del país, también podrían dar señales sobre el ánimo en el sector empresarial de cara a las elecciones de noviembre.