El pateador Justin Tucker falló un par de goles de campo y eso abrió el camino para que los Steelers derrotaran 16-18 en casa a los Ravens, un partido con pocos puntos, de una intensa rivalidad y que se definió hasta la última serie ofensiva Baltimore, que no pudo lograr una conversión de dos puntos que habría alargado el juego a tiempo extra.
Con esta victoria Pittsburgh puso su marca en 8-2 y dejó a los Ravens en 7-4. Lo curioso para la ‘Cortina de Acero’ es que no pudo lograr una anotación en el encuentro, así que sus 18 puntos fueron producto de seis goles de campo realizados por Chris Boswell.
El quarterback Russell Wilson lanzó para 205 yardas y sufrió una intercepción, Najee Harris corrió para 63 yardas y Jaylen Warren para 41, por aire el receptor más peligroso fue George Pickens para 89 yardas. Cabe señalar que hubo varias jugadas en la que el mariscal suplente, Justin Fields, tomó los controles, pero no para lanzar, sino para sumar 17 vitales yardas por tierra.