El expresidente brasileño Jair Bolsonaro negó cualquier violación a la Constitución en respuesta a la filtración de una confesión en la que su entonces edecán lo acusa de haber propuesto un plan golpista a altos oficiales de las Fuerzas Armadas para impedir el regreso al poder del progresista Luiz Inácio Lula da Silva.
El líder ultraderechista, en un comunicado divulgado por sus defensores, afirmó que, durante su Gobierno (2019-2022) nunca toleró cualquier movimiento o proyecto que no tuviese respaldo a la ley.
Bolsonaro “jamás adoptó cualquier actitud que afrontase los límites y garantías establecidas por la Constitución”, según el mensaje divulgado por Fábio Wajngarten, uno de sus abogados.