En un descubrimiento fascinante, dos excursionistas que exploraban las montañas Krkonoše, en la República Checa, encontraron una caja de aluminio sobresaliendo de una pared de piedra. Al abrirla, revelaron un asombroso escondite que contenía pulseras de oro, cajas de puros, una polvera y cientos de monedas.
Intrigados por su hallazgo, el dúo decidió entregar la colección al Museo de Bohemia Oriental en Hradec Králové. Allí, expertos están examinando cuidadosamente las piezas para intentar desentrañar su historia.
El hallazgo ha desatado una ola de especulaciones entre los habitantes locales, especialmente porque ninguna de las monedas proviene de la región. Miroslav Novak, jefe del departamento de arqueología del museo, comentó: “Una hipótesis es que la colección esté relacionada con las salidas de las poblaciones checa y judía antes de la Segunda Guerra Mundial, o con el éxodo alemán de la posguerra en 1945”.
Sin embargo, el enigma se complica aún más, ya que la moneda más reciente del tesoro data de 1921, planteando interrogantes sobre cuándo y por qué fue escondido este misterioso botín.