EFE / El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, celebró este martes los cinco años de la Guardia Nacional (GN) con el convencimiento de que, con Claudia Sheinbaum como futura mandataria, se garantiza la “continuidad con cambio” al frente del Gobierno federal y la estrategia de seguridad.

Así lo aseguró durante la celebración del primer lustro del cuerpo, que fue concebido por él en 2019 en sustitución de la Policía Federal y bajo la promesa de mantenerlo civil, aunque ha intentado en dos ocasiones integrarlo en la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

“Afortunadamente, habrá continuidad con cambio: va a continuar la transformación y esto (la política de seguridad) se va a consolidar como una estrategia para garantizar la paz y la tranquilidad”, se congratuló frente a los agentes de la GN y de buena parte de su gabinete.

Así, valoró su visión en el rubro de la seguridad y desgranó que, desde su llegada al Palacio Nacional, en 2018, la Administración “está atendiendo las causas” que producen violencia, como garantizar “ingresos suficientes” para la ciudadanía o que “se atienda” a las personas jóvenes.

“Como nunca se está distribuyendo con justicia el presupuesto público (…). Somos 35 millones de familias en el país y, a 30 millones les llega cuando menos una pequeña porción del presupuesto nacional”, aseguró.

Y, sobre “los cinco millones de familias restantes”, sostuvo que “se benefician” igual porque, “cuando abajo hay bienestar” y dinero “para consumir”, el resto de la sociedad también sale ganando.

Sobre todo en el rubro de las nuevas generaciones, adelantó que sus políticas “ya están empezando a dar frutos” porque, en su opinión, “ya son menos los jóvenes” que mueren en enfrentamientos o que “son detenidos por actos delictivos”.

La Guardia Nacional, “un ejemplo de honestidad”

Por otra parte, López Obrador sentenció que la Guardia tiene que ser “un ejemplo de honestidad” y un cuerpo “incorruptible” para que cumpla con la tarea de “garantizar la paz y la tranquilidad” de México.

Así, subrayó la aprobación de la que goza entre la ciudadanía mexicana: según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 78,4 % de la ciudadanía catalogó de “efectivo” el desempeño de la GN.

Sin embargo, la actuación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública ha causado polémica en México por afrontar acusaciones de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas y uso desproporcionado de la fuerza.

El mandatario, quien en sus campañas presidenciales prometió devolver los soldados a los cuarteles, ha justificado el uso de los militares en tareas de seguridad para enfrentar el crimen.

López Obrador recordó la trayectoria de la GN y su antecedente, la Policía Federal, que no tuvo “doctrina ni profesionalismo”.

“De ahí que, cuando llegamos a la Presidencia, se propuso hacer una reforma a la Constitución para que tanto la Sedena como la Secretaría de la Marina (Semar) nos ayudaran en la demanda de seguridad que tienen todos los mexicanos”, rememoró.

Con esta medida también nació la GN, que se encarga de la “protección en las carreteras” y sus resultados, según López Obrador, son plausibles.

“Ya no se escucha de que se extorsione a automovilistas”, celebró.

En su intervención, el comandante de la Guardia, David Córdoba, reiteró la posición del presidente y se congratuló de la situación actual del organismo.

“El trabajo no ha sido fácil; sin embargo, hoy tenemos un cuerpo policíaco profesional y disciplinado que se fortalece día a día, como lo requieren las exigencias de nuestro país”, indicó.

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