Italia, cuna de grandes compositores y majestuosas obras, ha sumado otro reconocimiento a su larga lista de contribuciones a la cultura mundial: el canto de ópera italiano ha sido incluido en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Este reconocimiento llega en un momento en que el país ve renacer el interés por estas tradiciones que trascienden generaciones.

¿Qué significa este reconocimiento para Italia?
El canto de ópera, junto a la pizza, ya son parte de la herencia global. Desde los últimos años del siglo XVI, Italia ha sido el escenario donde nace y se desarrolla este arte del bel canto. Compositores como Claudio Monteverdi y Antonio Vivaldi, Gioachino Rossini y Giuseppe Verdi, han dejado un legado que ahora la UNESCO celebra como una forma de arte viva.

¿Cómo es el canto de ópera italiano?
Según la UNESCO, el canto de ópera es una técnica vocal controlada fisiológicamente que potencia la voz en espacios acústicos. Está asociado con expresiones faciales y gestos corporales y combina música, drama, actuación y escenografía. Es un medio de expresión libre y diálogo intergeneracional, cuyo valor cultural es reconocido a nivel nacional e internacional.

La ópera en la historia de Italia
La primera ópera en Italia, ‘Dafne’ de Jacopo Peri, se presentó en Florencia en 1598. Verdi, el más grande compositor italiano del siglo XIX, nos dejó óperas como Rigoletto, La Traviata y Otello. Recientemente, el reconocido teatro La Scala de Milán inauguró su temporada de ópera con ‘Don Carlo’ de Verdi.

Otras joyas italianas en la lista de UNESCO
El canto tenor de Cerdeña, la dieta mediterránea y el arte de las cuentas de vidrio, son otras prácticas italianas en la lista. A pesar de que el café espresso italiano no fue incluido el año pasado, Coldiretti, la asociación agrícola más grande de Italia, busca promover la gastronomía italiana como próximo candidato.

La ópera italiana, más que un género musical, es una ventana a la historia y cultura de una nación que ha influenciado al mundo entero. La inclusión de este arte en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO es un paso más en la preservación y difusión de un legado inigualable.

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