En el marco del 494 aniversario de la fundación de Santiago de Querétaro, el alcalde Felifer Macías encabezó la tradicional Guardia de Honor en el Cerro del Sangremal, lugar emblemático vinculado a la leyenda fundacional de la ciudad. Acompañado por autoridades de los tres órdenes de gobierno, el edil rememoró el valor histórico del sitio donde, según la tradición, una aparición celestial marcó el inicio de una nueva etapa para la región.
Durante la ceremonia, Macías destacó la importancia del Cerro del Sangremal como punto de origen de Querétaro y evocó la figura de Conín —también conocido como Fernando de Tapia— como uno de los pilares de la fundación. Subrayó que, más allá de los mitos, el verdadero legado de la ciudad radica en su vocación de progreso, su herencia mestiza y su capacidad de construir futuro desde la identidad y la unidad.
“Sí, Santiago de Querétaro tiene mucha historia, mucha cultura, mucha tradición, pero tiene mucho más futuro, mucho más prosperidad, mucho más progreso y la gran esperanza de llegar al mejor momento de su historia”, expresó el presidente municipal durante su mensaje.
El acto también incluyó una mención al relato tradicional que habla del enfrentamiento entre indígenas y españoles, el cual habría sido interrumpido por un fenómeno sobrenatural que permitió el nacimiento de una ciudad mestiza, marcada por el comercio, la religiosidad y la convivencia cultural. En este contexto, se destacó la vigencia de expresiones como la danza de concheros, que mantienen vivo el legado espiritual y cultural de los pueblos originarios.
Como parte de la conmemoración, el grupo de concheros de Los Valencia entregó el Bastón de Mando al alcalde en un acto simbólico que refrenda el vínculo entre las autoridades civiles y las tradiciones indígenas, y reconoce la continuidad histórica que une pasado y presente en la vida de Querétaro.






