EFE / Organizaciones feministas de Argentina llevaron adelante este lunes la marcha anual “Ni una menos”, la primera bajo el Gobierno de Javier Milei, a quien responsabilizan de promover el odio hacia las mujeres y las “disidencias” mediante discursos y políticas de ajuste.
“La llegada de Javier Milei y Victoria Villarruel (vicepresidenta), sus medidas económicas, políticas, sociales, materiales y simbólicas constituyen un ataque al conjunto del pueblo argentino y en particular expresan su negacionismo de la violencia de género, el odio a las mujeres y a las disidencias sexogenéricas”, expresó la organización Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá), en un comunicado.
Las manifestaciones se realizaron en distintas ciudades del país, con epicentro en Buenos Aires, donde miles de personas se agolparon frente al Congreso Nacional para reclamar por la declaración de una “emergencia nacional” en materia de violencia machista y expresar su repudio a las reformas impulsadas por Milei.
“Porque se desmantelaron políticas públicas fundamentales para prevenir las violencias, mientras los femicidios no paran de crecer. Aprobar la ‘ley bases’ nos quita el derecho a jubilarnos y nos transforma en una colonia para las corporaciones transnacionales. Porque con odio y hambre no hay libertad y porque el hambre es violencia ‘Ni Una Menos’”, remarcó el colectivo feminista en un documento.
En lo que va del año, Argentina registró 127 víctimas de violencia machista, una cada 35 horas, de los cuales 114 fueron feminicidios, tres lesbicidios, un trans/travesticidio y nueve feminicidios vinculados de varones adultos y niños, según reveló el observatorio de feminicidios ‘Adriana Marisel Zambrano’, que dirige la ONG La Casa del Encuentro.
Los números de muertes de mujeres se mantienen estables en una década, ya que el Registro Nacional de Femicidios de la Core Suprema de Justicia, que viene recolectando datos desde 2014 contabilizó un total de 2.446 víctimas directas de feminicidio en el país con un promedio de casi 245 asesinatos por año.
“Las estadísticas no descienden con un Estado ausente que no muestra interés en elaborar políticas públicas para el abordaje, asistencia y prevención de las violencias de género y con una Subsecretaría de Protección contra la Violencia de Género que pareciera no tener voz”, explicó la ONG.
Una de las primeras medidas de Milei, tras asumir como presidente el 10 de diciembre pasado, fue la disolución del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, que ahora pasó a ser una subsecretaría bajo la órbita del Ministerio de Justicia sin un plan de acción o presupuesto declarado.
El primer “Ni una menos” fue el 3 de junio de 2015, tras el caso de Chiara Páez, una joven de 14 años embarazada, que fue asesinada a golpes por su novio de 17 años porque se negó a abortar.
Luego de nueve años, para las organizaciones feministas las convocatorias siguen vigentes porque los reclamos continúan sin cumplirse.