Quien no cesa en sus intentos por denostar y hacer ver mal todo aquello que lleve a cabo el gobierno de Mauricio Kuri es el diputado morenista Gilberto Herrera, quien mantiene una vieja querella personal con Mauricio Kuri y no le perdona que lo hayan dejado fuera de la contienda por la gubernatura, hasta ahora, los intentos de Herrera y los suyos, por criticar y señalar todo cuanto hace el gobernador parecen no hacer mella en el ánimo del gobernador queretano, todo esto, a pesar de que le han regalado unas verdaderas joyas que Herrera no ha dejado pasar y aprovecha un día sí y otro también para pegarle al gobernador en su claro afán por hacer ver que todo cuanto pasa en Querétaro, todo lo que hacen Kuri y su gobierno, está mal.
Pero para Gilberto no todo es miel sobre hojuelas, pues ahora son los universitarios los que mantienen el dedo en la llaga al señalarle una serie de malos manejos mientras duró su período como rector al frente de la máxima casa de estudios queretana; ante todos estos señalamientos lo único que Herrera ha sabido articular, es señalar que todo esto se trata de una guerra sucia en su contra. Nada más alejado de la realidad.
Por su parte y con una notable diferencia, Luis Humberto Fernández, el también diputado federal por Morena también hace lo suyo, pero marca su línea, es decir, comienza a desplegar un golpeteo político en contra de Mauricio Kuri y del PAN, pero lo hace tímidamente, con buenas maneras y estableciendo una notoria diferencia de su homólogo Gilberto Herrera, pues a diferencia de Herrera que todo lo ve mal, a la par, Fernández destaca la cosas buenas de ese Querétaro al que está comenzando a conocer luego de haberse avecindado en nuestro estado por órdenes de la presidenta.
De poco en poco, Fernández comienza a tejer alianzas con algunos de los liderazgos locales de Morena que también han pintado su raya de la agresiva forma de hacer política de Gilberto Herrera, que busca politizar todo con tal de hacer ver mal a Mauricio Kuri y todo aquello que huela a PAN. Fernández sabe que cuando la perra es brava, hasta los de casa muerde y por eso pone distancia de por medio en la forma de hacer política de Gilberto.
Mientras tanto, en el PAN apenas parecen estarse percatando de los temas que comienzan hacer agua en la embarcación y de poco en poco comienzan a surgir las voces que señalan estar a tiempo antes de que las consecuencias sean mayores y se repita el desastre electoral del 2009.