El conjunto carbayón volvió a tener un partido de Primera División 24 años después, pero la contundencia merengue apagó todo.

Tuvieron que pasar 24 largos años para que el Real Oviedo, actualmente propiedad del Grupo Pachuca, recibiera un partido en casa; sin embargo, Kylian Mbappé apagó la fiesta de súbito, anotó un doblete con el que el Real Madrid se impuso 0-3 en el estadio Carlos Tartiere.

Al cuadro merengue le costó trabajo descifrar el entramado defensivo que le tenía preparado el entrenador Veljko Paunovic. Por ello es que las acciones peligrosas llegaron sobre el final del primer tiempo. Franco Mastantuono disparó a un lado del poste al 34’, dos minutos más tarde Rodrygo tiró cruzado y el portero Aarón Escandell desvió.

La jugada del primer gol no estuvo exenta de polémica. Aurélien Tchouaméni barrió para recuperar el balón sobre un rival, el Oviedo pedía falta, pero la jugada continuó, Arda Güller condujo unos metros y metió un pase filtrado par Kylian Mbappé, quien recibió de espaldas al marco y definió de media vuelta para el 0-1 al 37’.

Los delanteros del Oviedo fueron auténticos llaneros solitarios. Salomón Rondón peleaba con su físico cada pelotazo largo y por aire que le quedaba cerca, pero nunca recibió un balón a modo y lo más que pudo hacer fue tratar de forzar un penalti tras un ligero empujón de Dean Huijsen que el silbante y el VAR no concedieron como penalti.

Después llegó un contragolpe con el velocímetro a tope cuando Arda Güller habilitó dentro del área a Federico Valverde, quien quedó de frente al arco, lo intentaron desestabilizar, pero alcanzó a disparar a quemarropa, pero el portero Escandell metió un manotazo salvador al 66’.

Luego fueron tres minutos convulsos en el partido. Vinícius fue amonestado por tratar de fingir una falta dentro del área al 80’, después Kwasi Sibo metió un disparo que fue a dar a la base del poste al 82’, era la jugada del empate, no la aprovecharon y la pagaron muy caro.

Vinícius robó el balón en la salida del Oviedo, condujo hasta los linderos de la media luna, filtró para Mbappé, quien definió con un derechazo cruzado para el 0-2 que puso sentencia casi definitiva en el partido.

Pero los merengues todavía lograron uno más en otro contragolpe, Vinícius recibió por la izquierda, entró el área y definió cruzado, de pierna derecha, con un toque sutil que dejó sin oportunidad al guardameta para el 0-3 al 90+3’.

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