Ciudad de México. — La mayoría oficialista en el Congreso de la Unión condenó este viernes “con absoluta energía” la “cobarde y grupal agresión” ocurrida en la sesión del miércoles pasado, donde legisladores del PRI y de Morena se enfrentaron en tribuna, en un episodio que terminó a golpes y que ya fue denunciado ante la Fiscalía General de la República (FGR).

El pronunciamiento aprobado por Morena y sus aliados sostiene que seis legisladores federales del PRI “organizaron, planearon e instrumentaron con alevosía y ventaja” una agresión contra el presidente de la mesa directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, la diputada Dolores Padierna y un trabajador legislativo.

El documento exhorta además a las mesas directivas del Senado y la Cámara de Diputados a dar seguimiento a las denuncias penales presentadas, al tiempo que exige al PRI “detener sus acciones violentas y conducirse con institucionalidad”.

PRI rechaza acusaciones

Durante el debate, los legisladores del PRI rechazaron los señalamientos entre gritos de “¡mentira!”. Alejandro Moreno Cárdenas, senador y dirigente priista, negó que su bancada ejerza autoritarismo y acusó a Fernández Noroña de no entender que la investidura legislativa no se obtiene “por imposición” desde el gobierno federal.

“La presidencia de un órgano legislativo la debe ostentar alguien con talante y talento, no un mentecato, buscapleitos, desequilibrado”, lanzó Moreno.

El senador Manuel Añorve responsabilizó al propio presidente de la Permanente de haber generado “violencia, confrontación y descrédito” en el recinto.

Morena defiende condena

En contraste, Fernández Noroña acusó a los priistas de actuar en bloque contra él. “Seis personas en mi contra y el cobarde soy yo. Nunca en la historia del país habían subido seis legisladores de un partido a agredir al presidente del poder legislativo”, afirmó.

La diputada Dolores Padierna subrayó que “la agresión física dentro del Congreso no es libertad de expresión, es violencia pura y vulnera el orden democrático”.

A su vez, la legisladora Lilia Aguilar, del PT, calificó el episodio como “una emboscada, una arremetida traicionera” y advirtió que es la primera ocasión en la que se agrede físicamente a un titular de poder.

Escalada política

La confrontación tuvo origen el miércoles, cuando Fernández Noroña negó el uso de la palabra a la bancada del PRI durante la sesión de la Comisión Permanente. El desencuentro derivó en manotazos, empujones y acusaciones que hoy escalaron al terreno judicial.

Pese al rechazo de la oposición, la condena fue aprobada con mayoría, reflejando la tensión política que marca la relación entre Morena y el PRI en pleno periodo legislativo.

Shares: