Pese a un arranque complicado en 2025, el sector comercio de Querétaro mantiene una visión cautelosamente optimista. En los primeros seis meses del año, el crecimiento económico local para este sector ha oscilado entre 2.3% y 2.7%, una cifra que, aunque por debajo de lo alcanzado el año pasado, aún supera la tendencia nacional, donde el crecimiento apenas ronda entre 0.3% y 0.7%.
Así lo dio a conocer Lorena Muñoz Altamira, presidenta de la Cámara de Comercio de Querétaro, quien explicó que el arranque del año estuvo marcado por fuertes retos, particularmente durante el primer trimestre, cuando las tensiones económicas internacionales, derivadas del cambio de administración en Estados Unidos, afectaron las proyecciones empresariales.
“El primer trimestre fue muy duro. La toma de protesta del presidente Trump generó incertidumbre sobre las políticas arancelarias de nuestro principal socio comercial. Esto obligó a muchas empresas a replantear sus planes de inversión y ventas”, explicó Muñoz Altamira.
A esta incertidumbre internacional se sumó un fenómeno que ha puesto presión sobre las empresas que abastecen al sector industrial: la ampliación de los plazos de crédito. Algunos proveedores han tenido que extender sus condiciones de pago de 30 a hasta 180 días, lo que compromete seriamente su liquidez y operatividad.
Sin embargo, el segundo trimestre trajo consigo señales alentadoras. Se ha reportado una ligera recuperación en las ventas, aunque el entorno económico aún no permite hablar de una estabilidad consolidada. “Hay mejor movimiento comercial, pero las condiciones nacionales siguen siendo complejas, con una inflación acumulada de 4.42% y una economía prácticamente estancada”, detalló la líder empresarial.
El panorama para la segunda mitad del año apunta a una posible recuperación, aunque moderada. Las expectativas, dijo Muñoz Altamira, son más prudentes que optimistas: se espera mayor certeza para los sectores industrial, comercial y de servicios, aunque difícilmente se alcanzarán las proyecciones originales de crecimiento al cierre de 2025.
En un entorno nacional marcado por la inflación, el enfriamiento económico y la inestabilidad internacional, Querétaro sigue mostrando resiliencia. Y aunque el comercio local no ha sido inmune a los embates de este semestre, mantiene su apuesta por cerrar el año con mejores números.