El prorruso Călin Georgescu ha presentado este viernes su candidatura a las presidenciales rumanas del próximo mayo, unas elecciones cuya primera vuelta él mismo ganó el pasado noviembre y que fueron anuladas por sospechas de que había financiado ilegalmente su campaña y de que Rusia interfirió en el proceso.
Georgescu que fundamentó su candidatura con 320.000, un tercio más de las que estipula la ley, aseguró a los seguidores que le esperaban ante Oficina Electoral Central que con la anulación de las elecciones “la democracia fue asesinada”.
“Hoy, 7 de marzo, el pueblo rumano se levantó de nuevo”, dijo el candidato, que está siendo investigado por financiación legal, creación de un grupo fascista y por atacar el orden constitucional.
Georgescu, que ha manifestado sus simpatías por Rusia, tiene el apoyo de los partidos ultranacionalista AUR, líder de la oposición, y POT.
El candidato aseguró que comparte los mismos ideales de “paz, democracia y libertad” que el presidente estadounidense, Donald Trump.
El rector de la Universidad de Bucarest, Remus Pricopie, ha presentado un recurso contra la candidatura, que tiene que ser estudiado primero por la Oficina Electoral Central y, de ser rechazo, por el Tribunal Constitucional.
También han presentado su candidatura el alcalde de Bucarest, el liberal Nicușor Dan, y la ha anunciado, aunque aún no formalizado, el exprimer ministro socialdemócrata Victor Ponta.