Brasilia. El Tribunal Supremo de Brasil ordenó este sábado reforzar la vigilancia policial en la residencia del expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022), donde cumple prisión preventiva, con el fin de impedir una posible fuga a pocos días del inicio de la fase final de su juicio por intento de golpe de Estado.
El magistrado Alexandre de Moraes, encargado del caso, dispuso que agentes de la Policía Penal de Brasilia registren todos los vehículos que salgan de la vivienda del exmandatario y entreguen informes detallados sobre conductores y pasajeros. También instruyó el monitoreo permanente de la zona externa de la residencia.
“Las medidas buscan conciliar la privacidad de la familia con la garantía de la ley penal y la necesidad de evitar cualquier posibilidad de fuga”, argumentó De Moraes en la resolución.
Aunque la Policía Federal había solicitado vigilar también los movimientos de Bolsonaro dentro de la casa, el magistrado desestimó esa petición, alineándose con la Fiscalía.
Contexto del proceso
Bolsonaro, que permanece bajo arresto domiciliario con tobillera electrónica y prohibición de usar redes sociales, enfrenta acusaciones por presuntamente liderar un complot para desconocer los resultados de las elecciones de 2022, en las que fue derrotado por Luiz Inácio Lula da Silva. También se le señala de incitar los ataques del 8 de enero de 2023 contra las sedes del Ejecutivo, el Congreso y el Tribunal Supremo.
La fase final del juicio comenzará el martes y podría derivar en una condena de hasta 40 años de prisión por cinco delitos, entre ellos asociación criminal y tentativa de abolición violenta del Estado de derecho.
Con esta decisión, el Supremo busca blindar el proceso frente a cualquier maniobra de evasión del expresidente, cuya figura aún polariza a la sociedad brasileña.
