Durante la más reciente sesión de la Comisión de Energía del Senado de la República, se aprobaron dos exhortos presentados por el Senador Agustín Dorantes Lámbarri, enfocados en supervisar la operatividad y seguridad de Petróleos Mexicanos (PEMEX), con el objetivo de proteger la productividad de esta empresa paraestatal, considerada un pilar estratégico para las finanzas nacionales.

El primer exhorto solicita a PEMEX y a la Secretaría de Marina un informe detallado sobre los asaltos registrados en plataformas petroleras y embarcaciones, así como las acciones que se implementarán para combatir este delito. De acuerdo con datos proporcionados por la propia empresa, estas actividades ilícitas han generado pérdidas estimadas en más de 401 millones de pesos durante los últimos siete años.

El segundo exhorto plantea la necesidad de que PEMEX aclare las quejas presentadas por refinerías estadounidenses, que reportan que el crudo recibido desde México presenta niveles de agua superiores a los estándares, lo que lo vuelve inadecuado para la producción de gasolina o diésel. Este señalamiento podría tener implicaciones serias para la reputación y el posicionamiento comercial de PEMEX en el mercado internacional.

Cabe destacar que, en marzo pasado, el Senador Dorantes ya había advertido sobre la crítica situación financiera y operativa de la empresa durante el debate en torno a la reforma a la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos. En aquella ocasión, denunció que PEMEX se encuentra en “terapia intensiva” y que la mayoría legislativa de MORENA únicamente ofreció una “aspirina legislativa” para intentar paliar la crisis de una empresa que, según señaló, ha dejado de ser una fuente significativa de ingresos para el país y de bienestar para las familias mexicanas.

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