Tesla, la compañía emblema del magnate Elon Musk, vive un complicado año en cuanto a resultados y capitalización bursátil, lo que ha provocado que su acción se desplome en Wall Street este año.
En su más reciente reporte financiero, la compañía reportó una disminución del 45 % en su ingreso neto en comparación con el mismo periodo del 2023, lo que acentuó el mal año para su título.
Con lo anterior, Valora Analitik consultó a Alejandro Useche profesor de la Escuela de Administración de la Universidad del Rosario, con el fin de dar un análisis de lo que fue la caída de la acción de Tesla en los mercados y cómo se ha venido moviendo en el mercado en los últimos años.
Así se ha movido la acción de Tesla en los últimos años
De acuerdo con Alejandro Useche, la acción de Tesla ha mostrado un comportamiento volátil en lo corrido de este año y, si damos una mirada de más largo plazo, ha sido una acción supremamente valorizada en algunos momentos, pero también muy deprimida en otros.
“Esto se debe a la naturaleza del negocio que está detrás en la medida en que representa la innovación tecnologías disruptivas que suelen tener estos grados de volatilidad en los mercados financieros. Para dar unas cifras de más largo plazo, si nos vamos a enero de 2020, la acción de Tesla estaba en US$29 y salta a US$409 en noviembre de 2021”, explica Useche.
Si en ese momento se hubiera hecho el mismo análisis, se habría calificado como acción ganadora valorizada en los mercados.
No obstante, dijo Useche, de esos US$409 en noviembre 2021 pasó a valer US$108 en enero de 2023, por lo tanto, en ese momento se calificó como una de las acciones de peor desempeño dada esta baja.
De igual manera, de acuerdo con Useche, de esos US$108 por acción en enero 2023, saltaron a valer US$293 en julio de 2023, mostrando que, a largo plazo, es normal que estas volatilidades se presenten en el mercado.
“Debemos analizar este tipo de acciones en un contexto de más largo plazo. Si nos concentramos solamente en lo que pasa con ellas en una semana o en un mes podemos perder el panorama amplio. Y es que por naturaleza son acciones con precios muy volátiles, debido a que están representando compañías que cuyo objetivo central es la innovación y generación de tecnologías disruptivas que en la medida en que ellas avanzan, generan en algunos momentos optimismo, precisamente por resultados positivos, pero en otros se presentan esta desvalorización como las que hemos visto con este nuevo anuncio de la empresa”, explica Useche.
¿Por qué cayó la acción de Tesla?
Para pasar el análisis más coyuntural, esta acción ha tenido un comportamiento a la baja efectivamente durante el mes de julio.
El máximo reciente, explica Useche, que fue el 10 de julio, estuvo en US$263 por acción y el mínimo reciente, que se presentó este 24 de julio, cayó a US$215 por acción, es decir, en estas dos semanas, entre Julio 10 y Julio 24, la acción cayó el 18 %.
En términos anuales, esto significa una caída del 40 %, pero, en lo que respecta al reporte del 24 de julio, esa acción bajó el 12 %.
De acuerdo con Useche, los motivos de la caída son múltiples, pero seguramente el potencial de crecimiento de recuperación de esta acción a futuro es muy importante.
“En un primer punto es que Tesla lleva tres trimestres consecutivos generando reducción de sus utilidades, entonces es una mala noticia para los inversionistas y para los mercados financieros que haya otro trimestre de unos resultados financieros deficientes. Ahí se debe diferenciar las utilidades de los ingresos de la compañía”, explica Alejandro Useche.
Y agrega: “Esta es una compañía con ingresos crecientes, pero con utilidades a la baja. Los ingresos crecientes se debieron a un mayor volumen de ventas por el negocio de generación y almacenamiento de energía, pero, por otro lado, hay unas malas noticias, digamos en cuanto a los costos y a los ingresos de otras áreas de su negocio”.
Esto quiere decir, dijo, que no se cumplieron las expectativas de ventas de vehículos, específicamente, y esto llevó a que la empresa tomara unas decisiones muy complejas relacionadas, entre otras, con despidos masivos para recortar esos costos de mano de obra que resultan representativos.
“A su vez, esta baja en las acciones se debe a que hay una serie de inversiones aplazadas y esto tiene algo temeroso a los inversionistas y a los mercados, porque actualmente no se sabe todavía cómo se va a desarrollar todo lo relacionado con la política en Estados Unidos y cuáles van a ser sus implicaciones”, señala el profesor de la Escuela de Administración de la Universidad del Rosario.
Un ejemplo que pone Alejandro Useche es que Tesla había anunciado una construcción de una planta de ensamblaje en México, lo que le ayudaría a bajar sus costos en relación con tener una fábrica en Estados Unidos.
Sin embargo, la empresa tiene por el momento aplazada esta decisión de inversión esperando los resultados de las elecciones presidenciales, ya que el candidato Trump ha manifestado que, si llega a ser elegido presidente, es probable que ponga impuestos a las importaciones incluidas aquellas que vienen de México.
“Entonces es claro que para esta empresa sería inconveniente poner hoy una planta ensamblaje en México que le permitiera bajar unos costos de producción para que entrara un nuevo gobierno, eventualmente de Donald Trump, y le aumentarán los impuestos y se perdiera esa ventaja de reducción de costos por producción en México”, indica Useche
Entre tanto, otra causa de la reducción del precio de las acciones de Tesla es que se estaba esperando el lanzamiento de los taxis autónomos pero la empresa anunció que iba a posponer este lanzamiento; esto genera que las expectativas de los mercados se hayan ajustado a la baja porque no se cumple esta promesa, y porque los ingresos que esa compañía hubiera tenido por la venta de los taxis autónomos que ahora se van a postergar.
¿Qué tendría que pasar para que el precio de la acción de Tesla vuelva a subir?
Hay algunos elementos que dependen de Tesla, pero otros que están en función de lo que pase con los mercados en los cuales esta empresa trabaja y también con el panorama político estadounidense.
“Entonces considero que Tesla podría recuperar una tendencia al crecimiento, tanto en sus utilidades como en su valor en bolsa, si es capaz de cumplir con las expectativas de los mercados, en cuanto a los avances efectivos en sus tecnologías y los lanzamientos correspondientes de líneas de productos que ya ha anunciado”, indica Alejandro Useche.
Específicamente en que se espera para octubre el lanzamiento al mercado de los esperados taxis autónomos. Además, aproximadamente para el año 2026, se anuncie el lanzamiento de un robot humanoide del cual se ha venido hablando bastante.
Con ello, dijo Useche, los mercados podrían responder positivamente frente a la acción de Tesla si perciben que hay un cumplimiento de las promesas y un desarrollo efectivo de las tecnologías que se han anunciado, o por lo menos evidencias concretas de avances en esas tecnologías.
“Así las cosas, no solamente Tesla, sino acciones muchas empresas, están pendientes de qué va a pasar con las elecciones estadounidenses porque de ahí dependerá en buena medida el cambio o la continuidad de condiciones para los negocios, la estabilidad política y los impuestos en general orientados a las políticas estatales frente al sector empresarial”, concluye Alejandro Useche.