Una exempleada de Sean “Diddy” Combs fue la figura central en su juicio penal federal este jueves y testificó que él la agredió física y sexualmente en múltiples ocasiones durante el tiempo que trabajó para él.
Se espera que la empleada, quien testifica bajo el seudónimo “Mia”, regrese al estrado el viernes para concluir la tercera semana de testimonios. La fiscalía ha indicado que se espera que el caso dure unas cinco semanas.
Combs se ha declarado inocente de los cargos de conspiración para delinquir, tráfico sexual y transporte con fines de prostitución. Si es declarado culpable, podría enfrentar una condena de hasta cadena perpetua.
La fiscalía ha declarado que Combs y algunos de su círculo íntimo actuaron como una organización criminal y recurrieron a amenazas, violencia, drogas, sobornos, incendios provocados, secuestros y mentiras para obligar a su exnovia Cassie Ventura a participar en “Freak Offs” y proteger la reputación del magnate musical.
La defensa ha reconocido que Combs fue violento con parejas sentimentales y que tenía “una vida sexual un poco diferente”, pero argumenta que no ha cometido los delitos federales que se le imputan.