Durante el rezo del Ángelus este domingo desde la ventana del Palacio Apostólico, el Papa Francisco hizo un enérgico llamado a la comunidad internacional para actuar con determinación en defensa del derecho humanitario en los conflictos armados.
“Que la comunidad internacional reaccione con firmeza para que en los conflictos sea respetado el derecho humanitario”, declaró el pontífice frente a una multitud de fieles que desafiaron la lluvia para congregarse en la Plaza de San Pedro del Vaticano.
Francisco condenó con contundencia los ataques a civiles e instalaciones esenciales: “Basta de atacar a los civiles, basta de atacar las escuelas, los hospitales, basta de atacar los lugares de trabajo”, enfatizó.
El Papa también renovó su invitación a orar por la paz en regiones afectadas por la guerra, mencionando específicamente a Ucrania, Palestina, Israel, Líbano, Siria, Myanmar y Sudán.
“La guerra es siempre una derrota, siempre”, reiteró el pontífice, subrayando su habitual mensaje de rechazo a los conflictos armados y su llamado a la comunidad global para trabajar juntos por la reconciliación y la paz.
Este mensaje se suma a los constantes esfuerzos del Papa por sensibilizar al mundo sobre las graves consecuencias humanitarias de la guerra y la necesidad urgente de acciones concretas para proteger a las víctimas y garantizar el respeto de los derechos fundamentales.