Despojado por el Bayer Leverkusen del título de campeón de liga alemana, del que era propietario único de 2013 a 2023, el Bayern de Múnich sufrió para imponerse 3-2 en la cancha del Wolfsburgo, este domingo en su primer partido de la Bundesliga 2024/2025.
Gracias a esta victoria lograda con mucho sudor, el gigante bávaro imitó al Leverkusen de Xabi Alonso, que el viernes también había tenido que exprimirse para derrotar al Borussia Mönchengladbach por el mismo resultado (3-2) fuera de casa.
El RB Leipzig, vencedor ante el Bochum (1-0), y el Borussia Dortmund, que hizo lo propio ante el Eintracht Francfort (2-0), también iniciaron con buen pie su temporada.
La anecdótica plaza de líder de la Bundesliga con una fecha disputada es para el Friburgo, que dominó al Stuttgart 3-1 el sábado y que acudirá a Múnich el próximo domingo, mientras que Leverkusen y Leipzig tienen cita el sábado en un primer duelo entre aspirantes al título.
En su primer partido en la Bundesliga en el banquillo del Bayern, el belga Vincent Kompany vivió un carrusel de emociones este domingo en el Volkswagen Arena de Wolfsburgo.
Sus pupilos fueron dominadores durante los primeros 45 minutos, y abrieron el marcador con justicia por medio de Jamal Musiala, a centro de Sacha Boey en el minuto 20.
- Fragilidad defensiva –
Pero en el segundo acto, Kompany pudo constatar la fragilidad defensiva de su equipo. Una veintena de segundos después del regreso de vestuarios, el Bayern cometió un penal por falta de Boey, que Lovro Majer no perdonó (47).
El internacional croata adelantó a los locales en el 55, culminando una contra iniciada luego de un error del defensor surcoreano del Bayern Kim Min-jae.
Las entradas en juego de Thomas Müller (65), que se convirtió en el jugador con más partidos en la historia del Bayern, junto a Sepp Maier (709), y de Kingsley Coman (75) dieron un nuevo aire al Bayern.
En el córner que siguió a la entrada de Müller llegó el gol en propia puerta de Jakub Kaminski. Y en el minuto 82, Serge Gnabry dio los tres puntos a su equipo.
“Estoy contento por haber ganado el partido. Con 2-1 para el Wolfsburgo supimos reaccionar bien”, expresó el centrocampista del Bayern Joshua Kimmich.
Kompany pudo tomar nota del trabajo que tiene por delante para hacer recuperar al Bayern la constancia en el juego que le faltó la temporada pasada. Pero a diferencia del ejercicio 2023-2024, su equipo supo mostrar una reacción de orgullo para evitar una salida en falso.
“Cuando empieza un partido tenemos un plan, y evidentemente el adversario se adapta para desbaratar el plan. En el primer tiempo habríamos podido hacer uno o dos goles más, pero estoy satisfecho”, explicó Kompany tras el partido.
El antiguo central belga de 38 años valoró la fuerza “mental” de su equipo. “Fue un partido difícil fuera de casa pero al final una buena victoria”, destacó.