La Secretaría de Salud (SESA) del estado de Querétaro se une a la conmemoración del Día Mundial de la Alergia cada 8 de julio, con el objetivo de concienciar a la población de la importancia de educar para la prevención de las enfermedades que son causadas por las alergias.
Cuando el sistema inmunitario reacciona ante una sustancia extraña (como el polen, el veneno de abejas o la caspa de animales) o un alimento que no provoca una reacción en la mayoría de las personas aparecen las alergias. Se puede presentar inflamación de la piel, los senos paranasales, las vías respiratorias o el aparato digestivo.
La gravedad varía según la persona y puede ir desde una irritación menor hasta anafilaxis (una situación de emergencia potencialmente mortal). Si bien la mayoría de las alergias no tienen cura, los tratamientos pueden ayudar a aliviar los síntomas de está.
El alérgeno más común es el polvo que se encuentra en alfombras, sillones, peluches, colchones y otros; está compuesto fundamentalmente por restos de animales, plantas y orgánicos.
Otros alérgenos que afectan a la población son pólenes de la familia del cedro, roble, olivo, fresno, trueno, y pastos, que de forma general polinizan en temporada invernal; el moho y algunos alimentos como el huevo y la proteína de leche de vaca.
En la población adulta, los alérgenos más frecuentes son las nueces de árbol, los cacahuates, crustáceos y pescados. Entre la población infantil, los desencadenantes de alergia más frecuentes son el huevo, la leche, cacahuate, nuez de árbol, trigo y soya.
También hay fármacos que desencadenan reacciones alérgicas, como la penicilina y los medicamentos para aliviar el dolor, como la aspirina y el ibuprofeno, que en un estado grave pueden producir crisis asmática o choque anafiláctico.
La anafilaxia es una emergencia médica que pone en riesgo la vida, puede hacer que se presente un estado de choque. Algunos de los signos y síntomas son los siguientes: pérdida del conocimiento, caída de la presión arterial, grave dificultad para respirar, erupción cutánea, aturdimiento, pulso rápido y débil, náuseas y vómitos.
La rinitis alérgica puede provocar: estornudos, picazón en la nariz, en los ojos o el paladar; mocos, nariz congestionada; ojos llorosos, irritados o hinchados (conjuntivitis). Una alergia alimentaria puede causar: hormigueo en la boca, hinchazón en los labios, lengua, rostro o garganta, urticaria e incluso anafilaxia.
Una alergia por una picadura de insecto puede ocasionar: una zona de una gran hinchazón (edema) en el lugar de la picadura, picazón o urticaria en todo el cuerpo; tos, opresión en el pecho, sibilancia o falta de aire, e incluso anafilaxia. En una alergia a un medicamento se puede presentar: urticaria, picazón en la piel, erupción cutánea, hinchazón en la cara, sibilancia, anafilaxia.
Se recomienda a la o el paciente, en la medida de lo posible, evitar el contacto con el alérgeno. En cualquier tipo de alergia se debe contar con valoración médica. Acudir al Centro de Salud para más información.