Manchester City escribió uno de los capítulos más fantásticos de su historia. En la Premier League , la que para la mayoría de los amantes del fútbol es la Liga más prestigiosa y entretenida del mundo, el equipo conducido por el español Pep Guardiola se consagró tetracampeón , un logro que ningún club había conseguido. La última función se empezó a resolver en menos de 20 minutos, con una eléctrica tarea del atacante británico Phil Foden , autor de dos goles en ese breve período de tiempo.
En el Etihad Stadium, el City derrotó por 3-1 a West Ham y ganó su décima Liga, dejando sin opciones a Arsenal , su escolta, que inició con cierta ilusión la última fecha del campeonato (dos puntos abajo), sin embargo el éxito 2-1 ante Everton no le alcanzó y terminó a dos unidades del campeón (91 contra 89).
En una carrera que hasta hace algunas semanas también incluía a Liverpool, los Citizens asumieron el favoritismo frente a West Ham con las virtudes que suele entregar en todos los campos de juego: asfixiante presión, circulación rápida y precisa, búsqueda ofensiva, claridad estratégica.