Una jueza federal en Washington, D.C., bloqueó de manera temporal las políticas del gobierno de Donald Trump que limitan el acceso de los miembros del Congreso a las instalaciones de detención de inmigrantes.
La jueza de distrito Jia Cobb determinó que es presumiblemente ilegal que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas exija un aviso previo de siete días a los legisladores que buscan ingresar para observar las condiciones de detención. Concluyó que ese requisito probablemente excede la autoridad legal del Departamento de Seguridad Nacional.
En su resolución, la jueza sostuvo que los legisladores tienen un interés legítimo en verificar si las instalaciones están superpobladas o en condiciones insalubres, si existen abusos por parte del personal o para ubicar a personas detenidas y a sus familiares.
La demanda fue presentada en julio por doce congresistas demócratas, luego de que se les negara el acceso a centros de detención tras la modificación de las políticas de visita del ICE. También impugnaron la exclusión de las oficinas de campo del ICE como espacios sujetos a visitas sin previo aviso, al considerar que estas medidas obstaculizan la supervisión legislativa durante las redadas migratorias a nivel nacional.
El gobierno argumentó que los legisladores carecían de legitimación para demandar y que era especulativo su planteamiento de que las condiciones pudieran cambiar en una semana. La jueza rechazó ambos argumentos y señaló que la naturaleza cambiante de las condiciones en las instalaciones hace inviable reconstruir la situación real si el acceso se retrasa.
Cobb, nominada al cargo por el expresidente Joe Biden, estableció que las políticas impugnadas interfieren con las facultades constitucionales de supervisión del Congreso.






