A través de la imagen en movimiento, el público se sumergió hasta 37 metros en las aguas del Pacífico norte de México para conocer una parte del patrimonio cultural que yace en el fondo del mar, durante la presentación del documental En busca de los pecios de la Baja California, que da cuenta de las historias que guardan los restos o fragmentos de embarcaciones naufragadas frente a las costas peninsulares.
La producción de la Coordinación Nacional de Difusión del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), realizada a través de su Dirección de Divulgación, en colaboración con la Subdirección de Arqueología Subacuática (SAS), se presentó el 25 de noviembre de 2025, en el Museo Nacional de Antropología, es resultado del proyecto “Inventario Arqueológico de Pecios de los siglos XIX y XX, en el Pacífico Mexicano”, encabezado por la arqueóloga subacuática Mariana Piña Cetina.
Retrata la importancia de esta rama de la arqueología en la documentación y recuperación de información de sitios y embarcaciones sumergidas, así como los esfuerzos que realiza el INAH para su conservación, en este caso particular, en dos puntos de gran potencial arqueológico: Todos Santos y el arrecife Sacramento, en las bahías de Ensenada y del Rosario, respectivamente, en el estado de Baja California, donde casi todo el transporte se realizaba vía marítima.
Se explica que estos lugares eran “panteones” para las embarcaciones, debido a la topografía, las marejadas y corrientes. Se relata la historia de barcos como el SS Sacramento, un vapor sidewheeler, que naufragó en el arrecife —por el que debe su nombre—, en 1872, el cual hacía viajes regulares de carga y pasaje entre Panamá y San Francisco, Estados Unidos.
Asimismo, se muestra la vinculación con las comunidades para el cuidado de dichos bienes y su concienciación al respecto, lo que ha devenido en un involucramiento en el que buzos y pescadores pasaron de ser informantes a convertirse en colaboradores. “Ellos también se quieren incluir en el proyecto, documentarse, ver las piezas y protegerlas”, explicó la arqueóloga tras la proyección.
Señaló que han realizado trabajo de sensibilización para que las personas sepan que no se deben alterar los contextos arqueológicos, porque se pierde información. “Es patrimonio de todos, no lo tocamos, no lo vendemos; no se trata de imponer desde el regaño, sino concientizar sobre su cuidado entre todos”, anotó.
En este sentido, el titular de la SAS, Roberto Junco Sánchez, coincidió en que cada pieza brinda información y aporta conocimiento: “El tipo de barco, la maquinaria, nos hablan de un momento específico de la navegación a vapor y de las rutas que circulaban por el Pacífico en la época de la fiebre del oro”, dijo.
Al respecto, el arqueólogo subacuático Gustavo García indicó que los pecios no son únicamente un atractivo turístico como sitios de buceo, sino lugares con una historia por contar. “Me parece interesante que podamos recuperarla y contarla a la gente, para que comprenda el valor de ese patrimonio, no solo en la parte económica, sino en lo importante de ese contexto”, dijo.
En cuanto a la parte técnica, el realizador Gibrán Huerta Castillo relató las dificultades a las que se enfrentaron para la grabar el audiovisual, ya que se trata de una actividad de alto riesgo que requiere mucha coordinación y cooperación de todo el equipo, además de la accesibilidad a los sitios y de afrontar bajas temperaturas bajo el agua.
Cabe mencionar que el proyecto arqueológico surgió a raíz de una serie de denuncias, que fueron atendidas por la SAS, y busca rescatar todas las naves que se hundieron en el Pacífico durante los siglos XIX y XX, a partir de investigación multidisciplinaria, además de tener un trasfondo social, en el que las comunidades estén involucradas en la divulgación, difusión y protección de tales bienes.
En busca de los pecios de la Baja California se estrenará próximamente a través de la señal de diversas televisoras públicas y del canal INAH TV en YouTube.






