Clearwater, Florida. – Brooke Hogan, hija de la leyenda de la WWE Hulk Hogan, afirmó que no le sorprendió haber quedado fuera del testamento de su padre, quien falleció en julio a los 71 años tras un ataque al corazón.
La fortuna del luchador, estimada en cinco millones de dólares, quedó en manos de su hijo Nick Hogan. Brooke aseguró a TMZ que esta fue su propia petición:
“Su decisión no me sorprende. Es lo que pedí, lo mantengo sin arrepentimientos. Mi padre sabe que soy muy trabajadora y que he sobrevivido sin su dinero durante mucho, mucho tiempo”.
Brooke y Hulk Hogan estaban distanciados desde hace varios años. En un emotivo mensaje publicado en Instagram tras la muerte de su padre, Brooke explicó que no hubo una “gran pelea”, sino una serie de conversaciones privadas que marcaron un cambio en su relación.
La también cantante relató que se mudó junto con su esposo, Steven Oleksy, y sus gemelos Oliver y Molly de Tennessee a Florida para estar cerca de su padre, pero su relación se fue enfriando. “Era como si hubiera un campo de fuerza a su alrededor que yo no podía atravesar”, escribió.
Brooke señaló que el distanciamiento coincidió con un embarazo de alto riesgo y con el deterioro de la salud de su padre, quien se sometió a múltiples cirugías en los últimos años.
“Sé en mi corazón que hice todo lo que pude (…) Él sabe cuán profundamente, cuán duramente y cuán puramente le amé. Estoy en paz sabiéndolo”, concluyó.



